– No nos quedan lágrimas, señor.
-¿ Ha mirado bien ?
– Por toda la tienda. Pero, si lo desea, nos queda una bolsita de quejas, varios kilos de carcajadas y lamentos recién hechos. También tenemos…
– Déjelo. Yo quería lágrimas.
– ¿ Eran para hoy, señor ?
– Para esta noche.
– Lo decía porque podríamos pedirlas, pero llegarían mañana.
– Imposible entonces. Veremos con que cara me presento luego en el plató de su adiós con portazo.
– Suerte, señor.
– De eso deme cuarto y mitad.
—–
C.D.G
(P.D: Sigo sin poder comentar, desde mi ordenador, algunas de vuestras creaciones. Pero os leo. Os leeré. Gracias)
¿Dónde está esa tienda? Es buenísima la idea…. y el final de remate. Qué punto tienes CDG!!! Como te descubran las editoriales te veo bajo la lluvia firmando libros el año que viene….
Besos
Muchas gracias, Sigrid.
La tienda está…ya te lo diré. Si me descubren las editoriales saldrán corriendo, como lágrimas en la lluvia…pero muchas gracias.
Por cierto, acabo de hacer una pequeña modificación en el relato respecto a cuando lo he publicado; cuestión de gustos (los míos).
Un beso
🙂
Genial.
Me recordaste algunos diálogos de M.Mihura.
Quien lo diría, eso de andar escasos de lágrimas.
Hasta éstas se fingen…
Besos, CDG.
¿Mihura?Bueno, bueno…has nombrado al autor de una de mis comedias preferidas, así que intentaré tapar el rojo de la cara con maquillaje caro.
Un beso y muchas gracias.
¡Tremendo, C.D.G.! Tan bien contado! Este tendero no le vio la veta todavía. En cuanto se avispe…
¡Saludos van!
Gracias Sandra y bienvenida. Ese tendero tiene futuro si se lo monta bien, sí..
Saludos.
CDG, no sé si me gustaría poder comprar estas sensaciones, emociones e intangibles que a día de hoy no se pueden adquirir. Creo que una de nuestras diferencias entre seres humanos, es la gran capacidad que tienen unos por sentir y otros la impotencia por esa misma capacidad.
Me gustó mucho la idea y el dialogo. Son originales y maestras.
Un abrazo, crack.
Cierto, Nicolás. Tan iguales, tan distintos…unos sienten todos, otros no pueden.
A mí me gustó mucho tu reflexión.
Un abrazo y gracias.
Me imagino que sabes lo mucho que me gustan los diálogos. disfruto al ir imaginando la escena a través de lo que hablan como en este tan surrealista.
Besitos
Muchas gracias, Elysa. Surrealista o no (a lo mejor me pasó ayer en una tienda del centro, quién sabe)…gracias.
Un beso.
Plas, plas, plas…
Besos desde el aire
Me gustan los diálogos del absurdo. Algún referente ya lo citan por ahí arriba.
Incluso Monty Phyton te lo compraría. Muy acertada la foto de Fawlty Towers, claro.
Aplausos y abrazos. Dos libras y quédese el cambio, gracias.
Gracias, Xesc. Monty Phyton…más maquillaje. Esa foto me vino a la cabeza cuando iba a publicar el diálogo. ¡Cómo olvidar ese sketch!
Y gracias también por la propina.
Saludos.
Ojalá existiera una tienda donde poder comprar sentimientos y emociones. Te aseguro que yo iría a comprar muchas sonrisas para regalar. Y es que hay algun@s que parece que les cobran por sonreír.
Ya te lo han dicho, pero lo repito…… ¡genial!
Besos!!!
Esperpéntico, irónico, tierno,… y nos lo creemos. Consigues «normalidad» en lo anormal.
Muy bueno.
Saludos.