Las prisas de los pies amotinados.
El ruido de la soledad del frío.
La brasa arrinconada de tu suelo.
El canto de la niña asilvestrada.
El roto de otro calendario roto.
La sombra del mensaje más reciente.
El rapto de dos mil gaviotas negras.
La bomba de tus ojos más abiertos.
Los ojos más cerrados de este día.
La búsqueda incesante de otro mundo.
Los versos agrietados de algún genio.
La alarma de una soledad de todos.
El filo de una catarata inversa.
El nido de una carcajada huída.
La barca del océano de llantos.
Los puntos cardinales de tu sueño.
Lo que soñaste ser y no has escrito.
Lo que debiera ser y siempre has sido.
El trago de las risas que mereces.
La bella levedad de tu murmullo.
Los hitos enclaustrados sin rosarios.
La música de mi palabra expuesta.
La tinta marchitada de estos versos.
La explicación pueril de este silencio.
—-
C.D.G
Fotografía: Elliot Erwitt (Museo Rodin, París)
(Por razones que desconozco, hay un espacio entre el primer y segundo «verso», que no debería estar. O sí)
Las prisas de los ojos amotinados
saltando de un verso a otro.
Sin ver el verso en blanco
o leyendo un silencio en verso.
Perdona que me tome esta licencia, pero me ha venido a la cabeza y cuando algo se me cuela dentro, si no lo saco no me deja dormir.
Unos versos, los tuyos, que dan que pensar, y eso me gusta.
Be(r)sos desde el aire
Nada que perdonar. Gracias a ti por sacar esos versos y enseñarlos.
Un beso.
De cualquier palo que tocas, subliminas contenidos.
Y creo que sí, que apresurados, dejamos pasar los aviones, la soledad, las mentiras y los silencios, las pesadillas, la puerilidad que nos habita y nos trasciende, la risa y el olvido.
Besos, Carlos.
Tanto como subliminar…pero muchos gracias, Eva.
Un beso
CDG, con la poesía, con la dificultad que tiene, también te desenvuelves con soltura. Tienen tus versos imágenes evocadoras repletas de literatura.
Un abrazo, crack.
Muchas gracias, Nicolás. Imágenes, eso son, como todo pensamiento.
Un abrazo.
me ha encantado este viaje de rotundidades, sensitivas, conceptuales, con la robótica melodía de fondo… «el filo de una catarata inversa»… toma!
Gracias, Raúl.
Esa canción, rara avis en la carrera de Neil Hannon, me tiene enganchado.
Saludos.
Muchas imágenes, muchas posibilidades para pensar. Este rebuscando ha merecido la pena.
Besitos